Todo (el tema) empezó cuando estaba un día X en la U, era una hora distinta, con gente distinta, un ambiente distinto, y en una parada distinta. Yo estaba ahí porque sí, ni siquiera en clases, y de un momento a otro me avisan que tenemos que hacer el examen de VOZ de nuevo, y yo me encontraba con la Vivi, pero la Cony no estaba y yo me quedaba "pero cómo vamos a hacer las aseadoras sin la cony", y aparte no me acordaba de los textos... y para rematarla, la Vivi me dice que también van los Taldos de la escena y yo menos me acordaba.
Entrabamos corriendo, el afore estaba DENTRO de la sala y yo entraba después haciendome la más natural, pero en realidad tenía la mente en blanco. La disposición de la sala estaba a lo largo y estaba Carlos Borquez solo mirandonos. La cosa es que empezó a parar la muestra, corrigiéndonos y yo le preguntaba a la gente de afuera si así era la cosa y todos "sí, si a todos nos paró y partimos de nuevo". Carlos Borquez me corrigió (algo que nunca fue de mi muestra) donde yo entraba como La Vieja Rosa y me esperaba mi hija que era como un ratón y me abrazaba y nos tirabamos a una mesa porque habíamos tenido una relación lésbica, por ende me mostraba el abrazo y la acción y yo estaba para dentro, no entendía nada.
Salímos de esa sala y me encontraba en un supermercado. Lo que entiendo es que había un supermercado que tenía una iluminación más de alógenos que lo habitual y había mucha gente d emi Universidad ahí, vestidos de trabajadores del supermercado. NO sé si era una obra, quizás era una intervención porque estabamos todos los actores/trabajadores ahí, y yo me doy cuenta que estaba paseandome por los pasillos haciendo mil piruetas, me tiraba en los congelados como si todo fuera un espectáculo, pero había gente noraml, los clientes. Yo hacía piruetas que ni en la vida podría hacer y estaba super animada, pero en un momento a una orilla me acerco al Kike a hablar del trabano (el actoral) y me empieza a comentar que lo que yo estaba haciendo no estaba mal, ni bien, sino que no era suficientemente destacable, y como que me lo decía no en mala onda pero las otras cosas que le dcían los demás le parecían más importantes. Por ende yo me iba y caminando por el supermercado pensaba "PUTA LA WEÁ, ESTOY DANDO LO MEJOR DE MÍ, NUNCA HABÍA ESTADO TAN CONTENTA Y ANIMOSA TODO EL DÍA, HAGO LAS PIRUETAS, ME MUEVO, ME RÍO... Y AÚN ASÍ NO ES SUFICIENTE"... Y me sentía super deprimida.
Al fondo del Supermercado, resultó haber un escenario, muy grande y con varias butacas. Por un costado (el izquierdo) habían unas escaleras oscuras que conducían tras bambalinas. A la derecha había como un marco gigante para tras bambalinas pero era notorio y parte de la escenografía. La coa es que yo me sentía bajoneada por lo que me dijo el Kike y subía por las escaleras tras bambalinas y a la pare habían otras que conducían a otra parte. Yo me echaba en esas escaleras de adentro en una posición donde la gente de afuera no podía verme, pero igual me veía derrepente. Y me preocupaba que me vieran de afuera porque justo había empezado la obra de los niños de primer año y yo estaba ahí metida y no tenía cómo salir. Empezaba la obra, yo me asomaba un poco para fuera y habían butacas en un segundo piso que estaba cubierto de vidrio para que nadie le tirara cosas a la gente de arriba, ni ellos a los de abajo. Los niños de primero no me veían, por suerte. En un momento decidí subir las escaleras donde estaba sentada y me conducía a otra pieza bien alta. Camino arriba, recordé que era un lugar privilegiado, donde pocos compañeros (como Fello) habían podido ingresar. Se trataba de la habitación de Lottus. ¿quién mierda era Lottus? Probablemente nadie en la vida real, pero en mi sueño era como un diseñador escenográfico demasiado legendario, donde en aquella habitación habían recreacciones pequeñas de sus escenografías. Yo entré, vi como colores rosados, pisos de maderas, unas rampas, y sentí una culpa inmensa de estar ahí y salí corriendo escalera abajo. La culpa era super grande como si me hubiera mandando el CAGAZO de mi vida.
Cuando bajé, me di cuenta que al fondo de las bambalinas habían 2 espacios: uno, cuya entrada estaba tapada por una cortina, y la otra seguía por un pasillo largo y oscuro hacia el fondo. Sentía que ya no podía seguir sentada en esa escalera, incómoda y sientiendo la energía de la habitación prohibida, por lo cual me escabullí por lo oscuro hacia la habitación con cortina, pensando que ahí estaría a salvo sin que nadie me viera hasta que terminara la función. La pieza estaba ocurísima, con unas luces pequeñas en una esquina como estrellas, al parecer una tele prendida, y junto a la entrada siento a alguien sentado con las rodillas apegadas a la cabeza y era la Montse. Ahí cuando la vi recién recordé que era sólo la Montse la que faltaba en el curso, y haciendo más memoria, recordé que la Montse había enloquecido después de una muestra con aquella misma escenografía que guardaba la habitación donde se encontraba. Ella me miró, pero no creo que me vio ( o sea, su cara giró hacia mí pero no creo que haya kachado que había alguien asomado a la puerta ). Sí, la Montse se había vuelto completamente loca con esa muestra y ahora vivía ahí adentro de esa pieza porque no podía estar tranquila en ningún otro lugar.
Yo me asusté y salí de ahí, volví a las escaleras a sentarme, no sabía qué hacer ni donde estaba. En un parpadeo veo a la Montse en el escenario, sentada en cuclillas, mirandome hacia las escaleras. Era la única que me había visto y estaba loca. Creo que mi presencia la hizo traer de vuelta la sensación del quiebre entre que estaba normal y se volvió loca. Me miraba fijamente, yo creo que de mí sólo se veía el brillo de mi ojo. Se comenzó a agitar, mirandome tan fijamente que apenas iba a lanzar un grito desgarrador, yo me desperté.
uffff qué mal rollo!!! menos mal que ya pasó.
ResponderEliminarNo se si lo entendí, pero me reí con lo del supermercado.
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