En la tarde estaba durmiendo y tuve un largo sueño donde predominaba mucho lo "amoroso" con distintas personas. Distintos cuadros de distintas relaciones. Todo ocurría en mi colegio. En un momento estaba con Fello y se suponía que lo conocía hace poco y me estaba viendo qué comprar en el kiosko; claramente nos gustábamos. Después iba al baño y había una niña que jamás había visto, me metía mucha conversa y quedábamos de juntarnos en los recreos. Aparecía en el patio de adelante y yo tenía una relación con Fabrizio y éramos perfectos, él andaba sólo con una toalla en la cintura y me tomaba por los hombros y caminaba hacia el oriente preparado a decirme que era gay, pero yo pensaba sólo en cuán grandiosa era su polla y poder haberla podido disfrutar. Frente a nosotros, la cancha chica, habían puros viejos vagabundos, asquerosos, y me empujaban ahí y yo los esquivaba, lo cual era en general bien fácil porque los weones estaban tan pal pico que no me pillaban; pero en una, uno me pilló y era terrible, me manoseaba entera, me quería culiar y yo no podía zafarme de él. Hasta que en un momento lo lograba. De ahí se anunciaba que en el colegio llegarían 20 alumnos nuevos (y en ese momento eramos como 30 no más), y prácticamente todos eran los hombres que iban 1 curso más arriba que yo. Estaban sentados en la galería porque había una presentación en la cancha grande, y yo muy normal me iba a sentar y todos me miraban; era bakán porque era como empezar de nuevo, entonces me podría meter con todos de una manera muy relajada. Pero me sentaba y veía que una niña nueva había llegado, pero era la JesuPizarro y me metía ene conversa y como que se notaba que yo le había gustado, y a mí también me había gustado. Pero eso duraba poco, porque ya se hacía de noche y llegaba Simón y su banda a tocar y ahí las cosquillas pasaban con Simón que se quedaba hablando conmigo. De ahí me teletransportaba al centro, de noche, oscuro y todo daba mucho miedo, juraba que me iban a asaltar-violar-matar, perlo lograba llegar a Baquedano. La cosa se dispersaba porque veia que había como un terreno, un campo ahí y estaban mi viejo en el asado con sus alumnos y había uno exquisito que pinchabamos altiro y nos escapábamos para puro agarrar.
Iba a escribir otra cosa a raíz de esto, pero ya me dio paja irme en la vola', así que creo que lo escribiré después. Pero de que mis sueños son de puta madre, puta, sí que lo son... nada de qué quejarme.
No... nada, dejemoslo así no más, otro día escribiré sobre las cosas. Otro día creo que divagaré en mis pulsaciones, el romance, las cosquillas, las ganas, la aceptación y todo el bla bla bla.
Pero hay una gran diferencia entre mis sueños y mi realidad, en todo caso, sí que la hay.
alucinante tu sueño.
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