el apagón.

Ayer llegué raaaaaja a mi casa, pero muerta.


A eso de casi las 8 me acuesto a dormir (sí, a dormir, tuve un viernes muy muy largo), por ende, dejé la televisión en sleep y me quedé dormida instantáneamente. Casi siempre hago eso y a veces cuando la tele se apaga, la siento y me vuelvo a despertar para ponerla de nuevo.


Cuando me desperté porque había sentido la tele apagarse, kaché que no era sólo la tele, primero la pieza, luego la casa y luego el sector.


La cosa es que estaba sola en la casa y en realidad me dio mucho mucho miedo (hola, me da miedo la oscuridad!) que incluso llamé a Simón para que viniera a mi rescate porque en realidad estaba muerta de susto. Pero el cansancio fue el mejor aliado porque no me daba tiempo para estar consciente de todo y me quedé dormida.


Elegí el mejor día para andar raja, porque así, me dio lo mismo.