Quiero comentar dos cosas.
El otro día me estaba acordando de la película "La boda de mi mejor amigo", cuando Julia Roberts se besa en una pérgola con su mejor amigo que estaba por casarse y en ese mismo instante llega Cameron Diaz (la prometida) y los ve con las manos en la masa. Resulta salir corriendo Cameron, y detrás de ella va su prometido, y detrás del prometido va corriendo Julia Roberts.
Cuando Julia Roberts le comenta lo que acaba de pasar a su amigo "gay", él le dice algo como "Ella estaba corriendo y él corría detrás de ella, ¿cierto?. Y tú ibas corriendo tras él... ¿y quién iba corriendo detrás tuyo?. Nadie."
Ahí me pasa que uno podría plantearse esa situación y ver quién iría corriendo tras de quién. Si serías una Cameron o una Julia Roberts.
Y segundo: Nunca podré sacarme fotos con la nueva cámara digital que sólo te saca fotos cuando sonrríes, porque yo casi nunca sonrrío en las fotos. cuek!
Adios.
viernes
domingo
vidrio.
Y si me sostengo en risas ligeras para suspender un poco aquello pesado que suelo tener. Y creo que por eso escribo, creo que por eso hoy quiero escribir. Quiero escribir lo que se me cruza en la mente, quiero escribir algo sin tener miedo de comprometer seriamente lo que podría llegar a decir. Creo que por eso es interesante estar soltera y botar unos que otros suspiros, una que otra chuchada, uno que otro ahogo, porque no te comprometen con nadie aunque quisieras que lo hiciera. (Y ya he dicho que a mí no me molesta sentir pena de vez en cuando, me refresca el alma una que otra lágrima esporádica). Bueno, eso que al parecer brilla más cuando son derroches 'adolescentes', parecen más bellos ¿no?, parecen más legítimos, parecen más aceptables.
Y qué pasa ahora. Yo no escribo para que me entiendan (a veces, como ésta), escribo para que alguien me lea y si estas cosas las entiendo yo, puede ser más interesante no contar las cosas tan explícitas, creo que no va al caso. Ganas, ganas tengo, ganas idiotas, ganas latentes, ganas palpables, ganas ingenuas, ganas de hacer cosas que no me cuesten el ojo de la cara aunque sean las más sencillas. Tengo ganas de abrazos sinceros y no a medias, de abrazar sin miedo y con una intención limpia por un segundo. ¿Has pensado alguna vez que cuando estemos muy felices ambos y nos encontremos un día podría ser absurdo, podría no tener sentido?. Podría ser triste. Y es que también me gustaría ser tan linda como tú crees (creíste) que soy, como imaginas(te) que soy, como dibujas(rías) que soy. Me gustaría ser tan, pero tan linda por un momento.
Yo no sé, siempre lo he pensado: ¿Las parejas que se quieren hoy SON realmente las unas para las otras?. ¿O es porque son lo que el alrrededor les propuso?. ¿Qué pasaría si realmente buscaran su alma gemela en el resto de los rincones en vez de limitarse al compañero de curso que conocieron entonces?. No sé si se me entiende. Creo que hay pocos casos que superan esa barrera, que derrepente se encuentran de alguna forma que en la vida jamás podrían hacerlo. Hasta ahora sólo Brian Weiss me ha dado una teoría (eso no significa que crea en ella por completo, pero al menos él tiene una).
Creo que extraño un poco mi delirio adolescente, creo que no me da miedo sentirlo, sé que me gusta aquello, porque sé que de ahí desenvuelvo mi alma, desenvuelvo mi voz. Pero hay límites, hay detalles que no te conducen a ese lugar. Y entonces de verdad no quiero que lo que ud. haya leído de aquí lo tome tan, tan, tan en serio. ¿Vale?
Suscribirse a:
Entradas (Atom)